Martinborough le debe su nombre a John Martin (1822-1892), un inmigrante irlandés que compró
una gran estación de ovejas en Wairarapa “Huangarua” en 1879. Subdividió su
granja en 593 secciones y en la parte norte fundó una pequeña ciudad con su
nombre que fue creciendo poco a poco como centro de servicios para las granjas de
ovejas de la zona inferior de Wairarapa, pero hasta 1928 no alcanzó la
calificación de ciudad. Esta ciudad fue creada en el terreno vecino de un
asentamiento conocido como Wharekaka existente desde 1970, cerca del
asentamiento maorí de Waihenga.
Martinborough
es el lugar ideal para pasear entre cualquiera de los 30 viñedos existentes por
la zona. Si no se tiene suficiente tiempo hay un centro del vino donde se
pueden degustar muchos vinos diferentes.
Para alojarse hay muchas opciones, casas de campo, hotel
boutiques, cottages, B&B y agroturismo. Es acoonsejable hacer la caminata
de “Patuna Chasm Walkway”.
Martinborough
se encuentra a poco más de una hora en coche de Wellington. Allí podrás visitar
la pintoresca plaza del pueblo y deleitarte en los excelentes cafés y
restaurantes. Muchos de los viñedos poseen sus propios cafés para parar a tomar
algo. Es muy recomendable hacer pequeños tours por diferentes bodegas para
poder captar el carácter de los viñedos y de los vinos que produce esta región.
Toast Martinborough:
es un festival que se hace en esta población anualmente, el tercer domingo de noviembre,
para celebrar la nueva cosecha en la que se catan vinos de la zona y se
degustan platos típicos, y con música en vivo que se suma a la sensación
distintiva de cada bodega. El Pinot Noir es la uva reina de la fiesta. Los asistentes al festival pueden pasear entre
las bodegas gracias a unos autobuses gratuitos que circulan constantemente. Doce
de las villas donde se encuentran los propietarios de los viñedos boutiques
forman un equipo con algunos de los mejores restaurantes de Wellington y
Wairarapa.
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